Economía paraguaya es la de mejor performance en la región en el primer semestre
El PIB de Paraguay creció un 4,8% en el segundo trimestre del 2024, acumulando un 4,6% en el primer semestre, impulsado por el dinamismo en los sectores de servicios, construcción y ganadería, mientras que la generación de energía eléctrica mostró un desempeño negativo.

El Producto Interno Bruto (PIB) de Paraguay experimentó un incremento interanual del 4,8% durante el segundo trimestre del 2024, según el informe más reciente del Banco Central del Paraguay (BCP). Con este resultado, el crecimiento acumulado al cierre del primer semestre del año asciende a un 4,6%, destacándose la fortaleza en sectores clave como los servicios, la manufactura, la construcción y la ganadería, que impulsaron el buen desempeño económico.

Sectores destacados

El sector servicios, el mayor impulsor del crecimiento, mostró un incremento del 6,2% en el segundo trimestre, alcanzando un acumulado de 5,6% en lo que va del año. Este comportamiento responde al dinamismo en áreas como el comercio, las telecomunicaciones y el transporte.

Por su parte, la construcción registró un crecimiento del 4,7% en el trimestre, acumulando un 1,2% al cierre del primer semestre. La reactivación de obras públicas y privadas, junto con un aumento en la demanda de insumos de producción nacional, favorecieron la expansión del sector, que había mostrado signos de ralentización en períodos anteriores.

La ganadería, la silvicultura y la pesca también contribuyeron positivamente, con un crecimiento interanual del 5,4%, acumulando un 5,1% en el semestre. El aumento del faenamiento de bovinos, aves y cerdos, junto con una mayor producción de leche y huevos, impulsaron este sector, que continúa siendo un pilar en la economía agroexportadora del país.

Agricultura y energía eléctrica

El sector agrícola tuvo un crecimiento más moderado del 1,0% en el segundo trimestre y un acumulado de 0,6% en el primer semestre. Las mejoras en la producción de cultivos como soja, trigo y arroz, entre otros, compensaron parcialmente la caída en la producción de maíz, que sufrió una retracción.

Sin embargo, la nota negativa la dio la generación de energía eléctrica, que experimentó un desempeño desfavorable, lo que atenuó el impacto positivo general de la actividad económica. Este rubro clave para la matriz energética del país sigue siendo afectado por condiciones hidrológicas desfavorables.

Perspectivas

A pesar del retroceso en el sector energético, el panorama económico para Paraguay sigue siendo optimista, gracias a la fortaleza de sus sectores productivos y de servicios. Con un primer semestre sólido, el país se encamina hacia una expansión económica sostenida en 2024, que podría verse fortalecida si se estabilizan las condiciones externas y el clima apoya una mayor producción agrícola y energética.