Crisis monetaria en Estados Unidos: la confianza mundial en el dólar se debilita y posiciona al oro como reserva de valor
Los cambios geopolíticos y la crisis presupuestaria del país norteamericano son algunos de los principales factores detrás del debilitamiento de la divisa.

El 24 de febrero de 2022, la invasión rusa de Ucrania conmocionó al mundo, desencadenando uno de los mayores conflictos en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. La rápida respuesta de Estados Unidos y sus aliados, que incluyó la congelación de activos rusos, resaltó el inmenso poder que el país norteamericano ejerce a través del estatus del dólar como moneda de reserva mundial.

Durante casi ocho décadas, este estatus proporcionó a EE.UU. importantes ventajas económicas, como unos costos de endeudamiento más bajos y una influencia sustancial sobre el comercio mundial.

Sin embargo, el conflicto de Ucrania llevo a muchos países, tanto aliados como adversarios, a reconsiderar su dependencia del dólar. Naciones como China y Rusia, entre otros países BRICS+, están ahora más decididas a desafiar el dominio del dólar y reducir su exposición a la influencia financiera estadounidense. La capacidad de Estados Unidos para utilizar el dólar como herramienta de guerra económica, combinada con sus desafíos fiscales internos, plantea riesgos significativos para el futuro del dólar como moneda de reserva mundial.

Solo en el año fiscal 2023 en Estados Unidos, el déficit presupuestario federal se disparó en casi 1,7 billones de dólares,

1. El déficit presupuestario estadounidense

EE.UU. lleva años registrando déficits presupuestarios sustanciales, sin que exista un plan claro para invertir esta tendencia. Solo en el año fiscal 2023, el déficit presupuestario federal se disparó en casi 1,7 billones de dólares, impulsado por el aumento de los costos de los intereses de la deuda nacional y el incremento del gasto público en sanidad, Seguridad Social y defensa. Con la deuda nacional superando ya los 35 billones de dólares, solo el pago de intereses podría erosionar la confianza mundial en el dólar. A pesar de esta alarmante tendencia, el conservadurismo fiscal está notablemente ausente del actual discurso electoral presidencial, lo que hace inesperado que la situación mejore pronto.

2. El déficit comercial de EE.UU.

Además de su déficit presupuestario, el país norteamericano registra un importante déficit comercial, importando sistemáticamente más de lo que exporta, una tendencia que persistió durante casi cinco décadas. En 2022, el déficit comercial alcanzó la cifra récord de 948.000 millones de dólares, y en 2023 fue de 773.000 millones, lo que resalta la dependencia del país de bienes y servicios extranjeros. Este persistente desequilibrio obliga a Estados Unidos a pedir préstamos a acreedores extranjeros, lo que incrementa aún más la deuda nacional. Aunque este déficit comercial fue sostenible debido a la confianza mundial en el dólar, un déficit continuado podría erosionar gradualmente esta confianza.

3. Cambios geopolíticos

La respuesta de Estados Unidos a la invasión rusa de Ucrania, en particular la congelación de activos rusos, amplificó la preocupación mundial por los riesgos de una excesiva dependencia del dólar estadounidense. Para muchas naciones, esta acción subrayó el inmenso poder que tiene sobre el sistema financiero internacional. En respuesta, el grupo BRICS+, compuesto por Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica, Irán y otros, se convirtió en una fuerza formidable, acelerando rápidamente los esfuerzos para reducir su dependencia del dólar. Juntos, esta asociación representa una población combinada de 3.640 millones de personas y aproximadamente 30 billones de dólares, o el 30% del PIB mundial, lo que los hace una coalición significativa e influyente en la economía mundial.

China, como actor clave dentro del BRICS+, estuvo a la cabeza promoviendo el uso de su moneda, el yuan, en el comercio internacional y forjando activamente acuerdos de intercambio de divisas con otras naciones. Además, Rusia, China y varios otros miembros del BRICS+ estuvieron aumentando rápidamente las reservas de oro de sus bancos centrales, una clara señal de su creciente malestar por mantener una parte sustancial de sus reservas en dólares estadounidenses.

En los dos últimos años, los bancos centrales extranjeros subieron considerablemente sus compras de oro, y solo en 2022 se adquirieron más de 1.136 toneladas métricas, el nivel más alto desde 1967. Simultáneamente, la cuota del dólar estadounidense en las reservas mundiales de divisas se desplomó alrededor del 71% a principios de la década de 2000 a cerca del 58,4% a finales de 2022, lo que refleja una tendencia decisiva hacia la diversificación de las reservas impulsada por la creciente influencia del bloque BRICS+.

El grupo BRICS+ se convirtió en una fuerza formidable, acelerando rápidamente los esfuerzos para reducir su dependencia del dólar.

“La cuestión de abandonar el dólar no es una cuestión de si lo queremos o no. Es una cuestión de si lo necesitamos o no. Y no lo necesitamos”.

- Vladimir Putin, junio de 2022

“La comunidad internacional necesita establecer un sistema financiero mundial más justo y equilibrado, y la diversificación de las monedas de reserva es un paso fundamental en esta dirección”.

- Xi Jinping en la Cumbre de los BRICS, septiembre de 2023

Implicaciones: Una perspectiva alcista para el oro

Si el dólar pierde su estatus de moneda de reserva mundial, es probable que su valor se desplome, con importantes implicaciones para los mercados mundiales. El oro sigue siendo la mejor opción para los inversores que buscan protegerse de este riesgo, y su demanda mundial fue evidente frente al dólar.

 

*Con información de Forbes US.